• A partir de la lectura del epistolario de Anna Melissa Graves, este trabajo recompone la relación de complicidad entre la escultora chilena Laura Rodig y la, hasta ahora desconocida “mecenas”, Consuelo Lemetayer. De manera específica, esta indagación de archivo analiza las redes queer de cooperación transnacional y transatlántica en las que participan estas intelectuales y artistas de la primera mitad del siglo XX. De manera general, el análisis contribuye a la reconstrucción, cuando menos parcial, de una historia cultural de mujeres escamoteadas por las memorias nacionales hegemónicas.